jueves, 18 de octubre de 2012

Ese sentimiento irracional.





 Hoy quiero hablar de los celos. Esa pequeña parte que a veces se despierta dentro de nosotros con el único propósito de amargarnos el día. Está claro que la base está en las inseguridades que tenemos. Los celos no son otra cosa que miedo a que la otra persona escoja a alguien por encima de nosotros, alguien que nos supere, que sea mejor.

<<Un punto importante es la comunicación de las sensaciones de malestar relacionadas con las escenas de celos a la persona que las propicia, con el fin de que el sujeto se haga consciente acerca del efecto de su comportamiento en la pareja (...)>>
 
 Aquí viene lo verdaderamente importante. No quiero analizar el sentimiento en sí, más bien quiero plantear el cómo deberían ser tratados estos celos por ambas partes, tanto por la persona que los sufre como por aquel por quien se sufren. 

Regla Nº 139 de un caballero: Su "nada" siempre es algo.
 Nadie quiere sentir algo así, es inevitable, solo puedes intentar controlarlos sin dejar que te controlen a ti. Pero, ¿cómo debes tratar a alguien que ha traspasado su límite momentáneo de paciencia celosa? ¿Y si esa persona lleva todo un día callando su instinto de pura supervivencia emocional y al final explota? ¿Es justo que parezca que es culpable diciendo que desconfía y haciendo que sienta que es todo una absurda paranoia? La mayor parte de las veces se solucionaría todo con un: "Lo siento, no creí que te fuera a molestar." O un simple: "Siento que te haya molestado, como yo no le doy importancia no pensaba que tú sí." Y ya está, problema solucionado. La persona celosa siente que fue sin querer, que no tiene importancia y que la otra persona siente haber hecho que pase un mal rato, y se acabó la comedura de cabeza.
Regla Nº 22 de un caballero: "Lo siento" no significa que ellos lleven razón y tú no. Significa que valoras más tu relación que tu ego.


 Pero por norma general los seres humanos tendemos a complicarnos con largas conversaciones en las que ninguna de las partes está de acuerdo, ninguno de los dos tiene razón y, por supuesto, no se llega a ninguna conclusión. Puede que ambos entiendan lo que siente el otro, pero nunca van a dar la razón si piensan que lo que sienten es lo correcto.



 Particularmente me parece mucho más preocupante la total ausencia de celos que su aparición. Si no te irrita ni siquiera un poco ver a tu pareja en una actitud extremadamente cariñosa con otra persona, si no sientes un pelín de miedo pensando que las relaciones no son irrompibles... Si no te molesta ver algo que simula un acto de pareja con alguien que no eres tú... No es normal, ni lógico. Somos humanos porque nos equivocamos, somos humanos porque sentimos. Si sabiendo que todo el mundo se puede equivocar no sientes miedo de que cometan un error que te afecte directamente... apaga y vámonos.


Regla nº374 de un caballero: Un verdadero caballero admite cuando está equivocado.

 Por otro lado, los celos basados en las inseguridades personales y en un déficit de autoestima sin sentido no deberían ser reprochados. No deberían discutirse. Tu pareja tiene miedo, no te quiere perder: ¡Cállate y trata de comprenderlo! No es tan complicado. Le asusta ver que hay muchos candidatos mejores, que no es suficiente o que no merece la pena. La solución no es pretender que reprima sus inseguridades sino luchar a su lado contra ellas.
Regla nº177 de un caballero: Tu novia no es la más bonita de todas, porque a tus ojos, ella debería ser la única que es bonita.

 Hay mil y una formas de tratar a la persona que te importa. Tal vez hagas todo bien y no entiendas que desconfíen de ti, pero todo tiene siempre una razón. Si te han roto el corazón, si te han hecho sentir que no vales nada, si te han utilizado, comparado, engañado e incluso humillado, sabes que lo único con lo que no puedes combatir es con tu sentimiento de pánico a que todo eso vuelva a repetirse. La única manera que nuestra mente tiene de protegerse cuando nosotros nos lanzamos a la aventura con una nueva relación sin pensar en los miedos por quienes nos han hecho daño, es un pequeño sistema de alarma inconsciente que salta cuando sentimos una situación de peligro. No puedes arrancar el sistema y, a veces, suena tan alto que no puedes evitarlo ni con tapones. Habla, comparte y elimina tus miedos poco a poco. No es una cura, pero si un tratamiento paliativo.
Regla nº37 de un caballero: Ten cuidado con lo que dices, una chica lo recuerda todo.


 Para terminar con el tema de los celos me quedo con la siguiente "Regla de caballero":


Regla nº234 de un caballero: Un chico pone celosa a su novia con otras mujeres. Un caballero hace que otras mujeres sientan celos de su novia.





No tomes decisiones cuando estés enfadado.
No hagas promesas cuando eres feliz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario