Hoy podría escribir de muchas cosas que se me pasan por la cabeza, pero en su lugar voy a dedicar parte de este blog a pedir disculpas, en cierto modo, por un blog pasado. Creo que a cierta persona no le sentó demasiado bien lo que escribí el día 2 de marzo (si no me equivoco de día) y, aunque en mi opinión no pone nada que sea "una sobrada" como dijo el implicado, quiero aclarar algunas cosas.
En primer lugar, mi intención no era ofender a nadie... más que nada porque en teoría esa persona no iba a leerlo, pero como N. le pasó la página, pues nada... El tema es que pese a que pido perdón, sigo pensando que dije verdades como puños.
En segundo lugar, puede que la comparación con las mentes de la Prehistoria fuera un poquito cruel... lo siento, pero tampoco iba en serio.
"La razón de que nos guste pensar bien de los demás es que tenemos miedo a lo que pueda sucedernos. La base del optimismo es el terror." El retrato de Dorian Gray, Oscar Wilde. |
Como dicen en Cómo conocí a vuestra madre: "Nada bueno pasa después de las dos de la mañana", que es cuando suelo escribir. Así que K. no me lo tengas en cuenta, a ciertas horas el lado de mi cerebro que escribe pide la independencia. Aun así no sé qué ves de sobrada...
En resumen, que mil disculpas por la forma de decir las cosas, podría haber dicho lo mismo intentando ser más suave, supongo... pero es mi forma de hablar.
"Ira por pegarle al sol si te quema demasiado, porque si te vas soy un tigre encerrado, ira contra esos amantes que pueblan las fotos de tu pasado…"Los siete pecados, Luis Ramiro. |
Cambiando de tema, me he pasado casi todo el día con la peque de la familia en brazos... por lo visto le gusto. Intentaba separarla para que la hicieran una foto y no quería. Creo que podría pasarme días mirando como se mueve, como sonríe al dormir y como se estira y bosteza...
Creo que hoy ha sido un día redondo desde que me he levantado hasta ahora. Tengo la teoría de que necesito dormir acompañada para no tener pesadillas, debería hacérmelo mirar.
Cuando he pisado la calle esta mañana hacía sol, hacía frío, pero se presentaba un buen día... aunque me habría encantado permanecer casi a oscuras todo el día.
Al salir de casa de mis abuelos, llovía. El suelo brillaba bajo la luz de las farolas y mi madre ha echado a correr con los tacones en un intento por llegar al coche antes de calarse hasta los huesos. Mi padre se reía de los pasitos cortos de ella. Y yo me empapaba por no querer ponerme la capucha...
Si pudiera verlo todo a cámara lenta por un segundo posiblemente elegiría la lluvia. Ver despacio cada gota, sentirlas chocar contra la piel...
Llevo todo el día con una canción en la cabeza... Luis Ramiro siempre me pones ñoña, no sé como lo consigues. Así que con un trozo de esta canción me despido por hoy...
Y el pecado que falta, cariño,
te lo digo al oído y te lo enseño con las manos…
mi pecado preferido me lo callo,
que hay gente escuchando…
Los siete pecados, Luis Ramiro.
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