Hoy solo dejo unos vídeos de partes de Cómo conocí a vuestra madre que me encantan. Ni siquiera voy a comentarlas, porque creo que no lo necesitan. Una serie que de verdad merece la pena.
Eso es todo lo que queremos en realidad, terminar una conversación con un beso, que conozcan hasta nuestros gestos y que nos digan simplemente sentimientos. La vida es más sencilla de lo que creemos. Y las series como esta son una forma de sentirse identificado con personajes o con sus errores. ¿No veré a la calabaza putilla hasta dentro de 10 años para darme cuenta de que no es la persona correcta?
Hoy medio Robin,
casi siempre medio Ted.
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